El día 27 del presente mes, un grupo reducido de la Sección Delegada se desplazó a la localidad de Aliaga (Teruel), con objeto de hacer el recorrido que discurre por los ríos La Val y Guadalope, respectivamente, partiendo del antiguo barrio minero de Santa Bárbara, pasando por la localidad, estrechos del río Guadalope con grandes murallones, hasta llegar a un collado desde el cual se puede ver el barrio de la Aldehuela con la antigua Central Térmica.
Existe un segundo tramo desde dicha Central al Molino de la Torca, sin abandonar el referido río; no obstante, hay que alejare de él debido a las grandes rocas y a las altas montañas que existen a uno y otro lado del mismo hasta el punto de resultar infranqueable para el ser humano. Únicamente apto para los animales de alta montaña en donde no se les podía dar caza moviéndose a sus anchas. Hasta hace un par de años que lo han habilitado para el senderismo, en el cual se pueden contemplar formaciones geológicas especiales y caprichosas, golondrinas y palomas de las rocas, flora, fauna y algunos arbustos que no se pueden ver en otros sitios; podríamos decir que se trata de un espacio virgen al resultar infranqueable por los seres humanos, por tratarse de un terreno muy escarpado en el que no ha intervenido la mano del hombre.
Este mismo día, un grupo mayor de esta misma Sección Delegada realizó el recorrido por la Sierra de Albarracín que forma parte de los Montes Universales. Se inicia en el Centro de Interpretación de flora, fauna y formaciones geológicas de Dornaque, continuando por la Pieza Llana en donde se pueden contemplar abundante vegetación, grandes formaciones rocosas y el típico pino de rodeno con gruesas cortezas y resistentes al calor y al frío. Este tipo de pino sirvió de sustento a los resineros que, en tiempos, extraían la resina de gran calidad y extraordinarias cualidades terapéuticas, además de ser una fuente de ingresos para la zona.
Teruel, 30 de Octubre de 2019.
EL PRESIDENTE,
Fdº. José Edo Martin